SOBRE NOSOTROS
Siempre dispuestos a enseñar la doctrina Bíblica, a fin de que podamos ser arraigados en nuestra fe. Efesios 4:14 nos dice, “para que ya no seamos niños fluctuantes, llevados por doquiera de todo viento de doctrina, por estratagemas de hombres que para engañar emplean con astucia las artimañas del error.” La iglesia está para ser un lugar de compañerismo, donde los cristianos puedan convivir fraternalmente y honrarse unos a otros (Romanos 12:10), instruirse unos a otros (Romanos 15:14), ser benignos y misericordiosos unos con otros (Efesios 4:32), animarse unos a otros (1 Tesalonicenses 5:11), y lo más importante, amarse unos a otros (1 Juan 3:11).
LO QUE CREEMOS
CREEMOS EN LAS ESCRITURA (LA BIBLIA)
Creemos que la Biblia es inspirada por Dios, que es por fe nuestra autoridad suprema y nuestra única guía para cambiar nuestro estilo de vida (ll Tim. 3:15-17)
CREEMOS EN DIOS
Creemos en un Dios eternal existente en tres personas: Padre, Hijo, Espíritu Santo. (Gen. 1:1; Deut. 6-4; Juan 4:24; Rom. 8:14-15)
CREEMOS EN JESUCRISTO
Creemos en la deidad de nuestro Señor Jesucristo, Su nacimiento virginal, Su vida sin pecados, Sus milagros, Su muerte propiciatoria, Su resurrección corporal, Su ascensión a la mano derecha del Padre, y Su regreso personal en poder y gloria. (Isaías 7 :14; Juan 1:1-18)
CREEMOS EN EL ESPÍRITU SANTO
Creemos que el Espíritu Santo es la tercera persona de la Trinidad, uno con el Padre y el hijo, el Consolador de cada creyente con el cual ha sido sellado. Su presencia en el cristiano es la seguridad de Dios para traer al creyente a la plenitud de la estatura de Cristo. Creemos que la plenitud del Espíritu Santo es manifestada por Sus frutos. (Gal. 5:22-23) y en el poder de testificar (Hechos 1:8; Juan 15:1-8)
CREEMOS EN LA EXISTENCIA DE SATANÁS
Creemos en la existencia de un real y personal demonio llamado Satanás 0 Diablo, opuesto a toda rectitud y exaltándose a sí mismo en contra de todo lo que Dios es y Sus propósitos. (1 Pedro 5 :8-9)
CREEMOS EN LA EXISTENCIA DEL INFIERNO
Creemos en un infierno literal, el lugar de tormento eterno para aquellos que deciden no creer en el derramamiento de sangre de Jesucristo (Lucas 16 :19-31; Mateo 25 :46; II Tes. 1 :9)
CREEMOS EN LA EXISTENCIA DEL CIELO
Creemos en un lugar literal llamado Cielo donde la presencia inmediata de Dios es manifestada, donde están los ángeles y donde ultimadamente estarán los redimidos, de donde Cristo descendió y ascendió y desde allí El intercede por los santos y de donde El vendrá a juzgar a vivos y muertos. (Hebreos 12:2-23 Juan 3:5, II Pedro 1:10-11)
CREEMOS EN LA CREACION DEL HOMBRE
Creemos que Dios creo al hombre a Su imagen y en estado de inocencia, pero que fue tentado por satanás y peco voluntariamente. Todo hombre nace muerto en trasgresión y pecado, y bajo condenación habiendo heredado una naturaleza corrompida. (Sal. 51, Rom. 5, Efesios 2 :1)
CREEMOS EN LA SALVACION SALVACIÓN
Creemos que Jesucristo murió por nuestros pecados de acuerdo a las Escrituras, como un sacrificio sustituto y representativo; que se levantó de los muertos en Su cuerpo glorificado, ascendió a los cielos, y que es nuestro gran Sumo Sacerdote y Mediador, El está intercediendo por nosotros; para que todo aquel que cree en Su nombre sea justificado en la base de gracia por la fe en El. (Juan. 1:12)
Por lo tanto, el creyente esta eternamente seguro y guardado por el poder de Dios. (Hechos 16:30-31; Efe. 1:2-10; Rom 5:8-10; Juan 3:16-18; 1 Pe. 1:5) Creemos que la Salvación es gratuita para todos, es por gracia por medio de la fe en Jesucristo y no depende de Buenas obras; No esta disponible solo para aquel que decide no aceptar a Cristo como su único Salvador. (Efesios2 :8-9)
CREEMOS EN LA REGENERACIÓN
Creemos que la regeneración es un trabajo del Espíritu Santo donde Dios imparte vida a aquel que está muerto en delitos y pecados. (II Cor.5 :17-20; Juan 3; Gal. 2:16-20)
CREEMOS EN LA SANTIFICACIÓN
Creemos que la santificación es un trabajo divino y progresivo del Espíritu Santo por el cual Dios, basado en la obra final de Cristo en la cruz, Su presente ministerio intercesor y Su Divina Palabra, separa al creyente y trabaja afuera, adentro y a través de él como con una voluntad sumisa a la cual es agradable a Dios por medio de Jesucristo. (Filipenses 2, 12-13, Efesios 5)
CREEMOS EN LA IGLESIA
Creemos en la verdadera Iglesia, el cuerpo y la Novia del Señor Jesús, en donde los creyentes son bautizados por el Espíritu Santo al convertirse. Creemos que la Iglesia local es una organización compuesta de creyentes que han hecho profesión de fe, constituida con el propósito de compañerismo, adoración y servicio. (l Cor. 12:13; Mateo 16:15-19; Hechos 2:41-42; Efesios 1:22-23 ;1 Tim 3:1-15)
CREEMOS EN EL BAUTISMO
Creemos que el bautismo cristiano por inmersión de un creyente en el agua, en el nombre del Padre, Hijo, y Espíritu Santo, es el modo de bautismo en la Biblia y testifica de la fe e identificación del Creyente con el crucificado, enterrado, y resucitado Salvador. (Mateo 3:13-17, 28:19-20; Rom. 6:3-5)
CREEMOS EN LA CENA DEL SEÑOR
Creemos que la Cena del Señor es una ordenanza por la cual los creyentes dan a conocer la muerte del Señor hasta que El venga. (l Cor. 11: 18-34)
CREEMOS EN LA SEGUNDA VENIDA DE CRISTO POR SU IGLESIA
Creemos en el glorioso, eminente, visible y corporal regreso de Cristo. (l Tes. 4:13-18; Juan 14:1-6)
CREEMOS EN LA SEPARACION
Creemos en que cada hijo de Dios debe dar testimonio y demostrar su separación del sistema del mundo. Donde son evidentes los frutos espirituales, la obediencia hacia los mandamientos de las Escrituras y el rechazo a toda cosa que traiga reproche hacia el carácter y el trabajo de Cristo en Su iglesia. (1 Cor. 6:14-16; Efesios 1, Rom 12:1-2)
NUESTRA VISION
Ser una iglesia ejemplar, diferente y grande, no solamente en número, sino también en poder del Espíritu Santo de Dios. Poder modelar los mejores valores del Reino, plasmados en la Palabra de Dios, fundamentados en los dones y el Fruto del Espíritu Santo, mostrando la excelencia y el funcionamiento de los cinco ministerios dados a la iglesia, el involucramiento comunitario, la administración y la capacitación de los miembros para llegar a ser Siervos efectivos de Jesucristo. El Señor (Jesús) es nuestro Pastor.
LO QUE HACEMOS
Promovemos la formación de discípulos radicalmente comprometidos con el Reino de Dios, llenos del Espíritu Santo, capacitados para evangelizar, discipular y servir a otros, por medio de una iglesia de excelencia, fundamentada en los principios de la Palabra de Dios, y creyendo en la La multiplicación de la iglesia como parte de la visión y la misión de Cristo, Donde los discipulos son formados y equipados para luego ser enviados a cumplir con la gran comisión. Nuestro galardón esta, en vista del crecimiento y desarrollo del discipulo que, con el paso del tiempo es convertido en maestro, para seguir haciendo discipulos.
NUESTRA GENTE
Como Comunidad de Vida Cristiana, somos una organización no gubernamental, sin fines de lucro, conformada por cristianos laicos, inspirada en el modelo de vida espiritual de nuestro Señor Jesucristo y el modelo ministerial del apostol Pablo. Esta comunidad la conforman personas de toda América latina y el caribe, todos inmigrantes, sembrados en esta nación para provocar un avivamiento en El Espiritu, concientes de que es el tiempo de la comunidad hispana para ser instrumento de Gloria y vasos de honra, preparados para Ser usados por aquel que nos llamo de las tinieblas a Su luz admirable y que Es fiel para cumplir lo que ha prometido.
AUMENTA TU FE
Comenzar nuestro viaje de fe en Dios requiere que nos sumerjamos en su palabra (Romanos 10:17; 1 Pedro 2:2). Debemos aprender acerca de su amor, su justicia, su misericordia y su plan. Debemos formar una relación con El, de modo que podamos conocerlo personalmente a través de su Hijo Jesucristo (Juan 17:3). Debemos pedirle que se revele a nosotros y nos cambie. La biblia promete que si buscamos a Dios, lo encontraremos (Mateo 7:7). Y si se lo permitimos, él nos transformará en personas nuevas que pueden conocer su voluntad (Romanos 12:2). Tenemos que estar dispuestos a morir a nuestra vieja naturaleza y dejar de lado el orgullo y el egoísmo que nos alejó de él durante tanto tiempo. En la medida que Dios nos cambia, aprenderemos a desarrollar el fruto que viene del Espíritu Santo, que habita en todos los cristianos (Gálatas 5:22-23; Juan 14:17). Mientras caminamos en el Espíritu, permitiéndole controlar nuestras vidas, empezaremos a confiar en él. "Arraigados y sobreedificados en él, y confirmados en la fe, así como habéis sido enseñados, abundando en acciones de gracias" (Colosenses 2:7).